sábado, 1 de diciembre de 2012

Ejercicio sexual extraconyugal



 

Cuando una mujer conoce a un varón que hubiera elegido para padre de sus hijos, jamás debería dejar de disfrutarlo.

A muy temprana edad se despertó en mí una clara sensibilidad hacia algunos semejantes.

Como no tengo proximidad natural a niños africanos desnutridos, como vivo lejos de algún leprosario y como las viviendas más pobres de mi país están a varios kilómetros de mi casa, no tengo oportunidad de sensibilizarme con esos estímulos tan frecuentes y abundantes.

Sin embargo mi dolor aparece cuando veo cómo algunos adultos corren innecesariamente por las avenidas, los parques y la rambla.

Reconozco que me dan lástima. Los imagino perseguidos por fantasmas hipocondríacos que en sus voces alucinatorias les hablan de colesterol, diabetes, obesidad.

No descarto la posibilidad de que algún día sean ellos los que sientan lástima por mi artrosis, ceguera, cuadriplejia, pero apenas lo menciono para lucir realista y ocultar mi intenso deseo de negar estos peligros.

Como puedo elegir he optado por rechazar la filosofía médica y adhiero a otra creencia que me parece mucho más humana, natural, lógica, entretenida, social, saludable, amorosa.

He comentado en varios artículos mi suposición de que las mujeres son las que eligen a los varones (1) con los que su instinto les dice que podrían tener hijos hermosos y saludables.

Tengo para decirles que la sexualidad está asociada a fantasías inconscientes de gestación, aunque la menopausia haya clausurado irreversiblemente la generación de endometrio.

Por lo tanto, les digo a esas señoras que nunca pierdan oportunidad de tener sexo con los hombres que ellas continúen eligiendo para tener hijos, que ahora serán solo imaginarios. Con su esposo jamás volverá a tener pasión, por eso tienen que aceptar las nuevas y escasas oportunidades pero no comentárselo a él porque no se merece sufrir un desengaño ni padecer celos.

(1) Algunas menciones del concepto «las mujeres eligen a los varones»:

 
 
 
 
 
(Este es el Artículo Nº 1.749)

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