viernes, 2 de agosto de 2013

Buenos padres de familia pese a todo



 
Podemos destinar nuestros recursos a luchar para provocar cambios sociales estructurales..., pero sin dejar de ser «buenos padres de familia».

— Es cierto que los poderosos quieren debilitarnos para que no lleguemos a ser sus competidores.

— Es cierto que los ricos tratan de conservar su riqueza, aún a costa de que los pobres padezcan dolorosas escaseces que los ricos podrían evitar sin por eso resentir su bienestar.

— Es cierto que los sistemas educativos de todos los países están diseñados para conservar las diferencias entre las clases sociales, inclusive cuando los gobernantes susurren, digan o griten, que ellos sólo aspiran a un mundo mejor, a crear seres humanos felices, a que «los más perjudicados sean los más privilegiados».

Todo eso supuestamente es así. Estoy dispuesto a admitirlo, pero sin dejar de mencionar algunas salvedades obligatorias.

Quienes hemos asumido la responsabilidad de ser buenos «padres de familia», sin importar nuestro sexo anatómico, los varones o mujeres que tenemos a cargo cuidar a nuestros seres queridos cuando no pueden ganarse la vida por sí solos (niños, ancianos, enfermos, laboralmente desocupados), podemos tener en cuenta que existen injusticias (abuso de los poderosos, explotación, mal reparto de la riqueza), pero eso no puede justificar que dejemos de ser «buenos padres de familia».

Quienes justifican su desgano son funcionales a todo lo que supuestamente está mal.

En otras palabras: las injusticias mencionadas más arriba son parte de nuestro hábitat, son naturales, no son tipificadas como delitos, aunque moralmente sean condenables, son características del escenario donde tenemos que actuar, es la realidad que nos tocó.

Son dificultades comparables con los obstáculos que nos impone la naturaleza, tales como lluvias, nieve, sismos.

Quizá podemos destinar parte de nuestro tiempo, energía y otros recursos a luchar para provocar cambios sociales estructurales..., pero sin dejar de ser «buenos padres de familia».

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